jueves, 6 de octubre de 2011

Debéis aprender , para luego, desaprender !!!!

Me ha dado qué pensar; esta campaña de Ing me ha recordado cuando en clase comento a los alumnos  que  deben dudar de nuestras explicaciones, que deben confiar en ellos mismos, ser dueños de su aprendizaje, comprobar su trabajo detectando posibles errores, hablamos de Descartes y su duda metódica:

"Mais, aussitôt après, je pris garde que, pendant que je voulois ainsi penser que tout étoit faux, il falloit nécessairement que moi qui le pensois fusse quelque chose. Et remarquant que cette vérité: je pense, donc je suis, étoit si ferme et si assurée, que toutes les plus extravagantes suppositions des sceptiques n'étoient pas capables de l'ébranler, je jugeai que je pouvais la recevoir sans scrupule pour le premier principe de la philosophie que je cherchois."

"Pero en seguida advertí que mientras de este modo quería pensar que todo era falso, era necesario que yo, que lo pensaba, fuese algo. Y notando que esta verdad: yo pienso, luego soy era tan firme y cierta, que no podían quebrantarla ni las más extravagantes suposiciones de los escépticos, juzgué que podía admitirla, sin escrúpulo, como el primer principio de la filosofía que estaba buscando"


«Cogito ergo sum» , traducción del planteamiento original de Descartes n su famoso Discurso del método (1637)., en francés: "Je pense, donc je suis".


Aunque ..., desaprender es un término que no está bien visto en la vida, pero,parándonos  a reflexionar es lo que necesita esta sociedad: el profesor ha de desaprender su papel de maestro para aprender el de administrativo, el hombre occidental ha de desaprender a seguir anhelando el crecimiento  económico exponencial ilimitado y aprender a vivir con menos.

¿ Y tú, qué debes desaprender, antes de aprender?. ...



Como decía Facundo Cabral"Debería haber una escuela para desaprender, para sacarnos de la cabeza todo lo que no sirve. Lo que es útil para cada uno nosotros es solamente lo que es útil para la humanidad."



 
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“ Un maestro Zen invitó a tomar el té a uno de sus discípulos, mientras charlaban animosamente, el maestro tomó la tetera con delicadeza y comenzó a llenar la taza de su alumno, sin mirar aparentemente lo que hacía, y , así, prontamente la taza estuvo totalmente llena, sin embargo continuó parsimoniosamente vertiendo el té, desparramandose en el platillo, mesa,  cayendo al suelo.
El discípulo aturdido ante lo insólito del caso, dijo, “Maestro, deje de llenar mi taza, que se está derramando el té”.
El maestro con serenidad respondió. Eres un excelente observador, pero, si de verdad quieres recibir mis enseñanzas, debes vaciar tu mente de sus contenidos actuales, y, dejar que se llenen con cosas nuevas que desborden tu recipiente”.



Descubriendo a Emmy Noether de la mano de Eduardo Sáenz de Cabezón.

                Verano, es tiempo de aprender, y para ello hay que leer; empiezo un libro : "El árbol de Emmy. Emmy Noether, la mayor ...